"El mito de Europa en los mosaicos hispano-romanos" Espacio, tiempo y forma. Serie II, Historia antigua, Nº 8, 1995, pags. 383-438

Autor: 
SAN NICOLÁS PREDAZ, M. P. y LÓPEZ MONTEAGUDO, G.

Mencionado numerosas veces en los textos antiguos (Hom. //. XIV 321- 322; Hesiod. Theog. 357 y fragm. 52; Herod. Hist. I 2 y IV 45; Mosch. II 1- 152; Ovid. Met. II 836-875; Fast. V 603-620; Her. IV 55; Ars am. I 23 y VI 103-107; Hor. Od. III 25 ss.; Nonn. Dion. I 46 ss.), el mito de Europa se sitúa en la antigua Fenicia y relata cómo Europa, hija de Teiefasa y de Agenor o Fénix, rey de Fenicia, estando un día recogiendo flores junto a sus compañeras en las playas de Tyro o de Sidón (Mosch. II 34 y 37), reparó en un toro de color blanco que pastaba entre los rebaños de su padre. La joven princesa, entre asustada y maravillada, se siente atraída por un animal tan bello y apacible y, no sospechando que se trata del propio Zeus que se ha metamorfoseado en toro para seducirla, le acaricia, le ofrece flores como pasto, le adorna con guirnaldas y termina por subir a su grupa, momento que aprovecha el animal para salir corriendo hacia el mar y dirigirse a Gortyna, en la costa sur de Creta, o a Tebas en Beocia, donde como colofón de toda una secuencia de seducción amorosa, que tiene su cénit durante la travesía marina, se consuma la unión junto a una fuente y bajo un plátano que, en recuerdo de estos amores, obtuvo el privilegio de no perder nunca las hojas.